El Salvador registró en noviembre 131 homicidios, según datos proporcionados por un portavoz del ministerio de Seguridad.
Además, entre junio y noviembre se contabilizaron 907 homicidios.
El director de la Policía Nacional Civil (PNC), Mauricio Arriaza, señaló en octubre pasado que el país registraba 2.080 homicidios, entre enero al 20 de octubre.
Las autoridades responsabilizan a las pandillas Mara Salvatrucha (MS13), Barrio 18 y otras minoritarias de los altos índices de homicidios.
El Ejecutivo de Nayib Bukele atribuye una baja porcentual en los asesinatos con respecto al año anterior a un plan de control territorial lanzado el pasado 20 de junio y con el que se han concentrado a más de 7.000 agentes de la Policía y del Ejército en 22 localidades.
El plan también incluye la rotación de los pandilleros presos para supuestamente romper la organización de dichos grupos al interior de las prisiones y cortar sus comunicaciones con el exterior.
El Gobierno de Nayib Bukele ha solicitado a la Asamblea Legislativa le autorice más de $200 millones en préstamos por encima del presupuesto 2019 para su Plan de Control Territorial, mientras, a pedido para 2020 en el proyecto de ley del Presupuesto Nacional para Seguridad y Defensa unos $646 millones, contra $471 millones presupuestados para 2019. Además de $99.1 para la Fiscalía General de la República (FGR).
Diferentes organizaciones han criticado el plan de seguridad de Bukele porque, a su juicio, repite acciones implementadas en anteriores Gobiernos y con las que no se consiguieron resultados duraderos.
El aumento de efectivos militares en las calles es uno de los elementos del plan más cuestionados, dado que Bukele ha prometido incrementar la cifra de soldados en labores de seguridad.