El ministro de Gobernación de Guatemala, Enrique Degenhart, dijo este día, en conferencia de prensa, que el convenio alcanzado con Estados Unidos para convertirse en el tercer país seguro de asilo solo aplicará a migrantes provenientes de El Salvador y Honduras.
Degenhart rechazó que el acuerdo migratorio convierta a Guatemala en un «tercer país seguro». «El hecho que Estados Unidos lo tipifique de esa manera no implica que nosotros lo definamos de la misma forma»,
En una conferencia de prensa después de la reunión semanal del gabinete de gobierno, el titular de la cartera de Gobernación volvió a negar que este convenio convierta a Guatemala en un tercer país seguro para migrantes, tal y como dice Estados Unidos, porque esta definición no existe e hizo un llamado a la cordura porque las repercusiones, de no implementar dicho convenio, serían nefastas.
Dicho acuerdo, firmado la semana pasada entre los gobiernos de Guatemala y Estados Unidos, obligará a los migrantes solicitantes de asilo a que lo hagan dentro de territorio guatemalteco.
«En el tema de migración se acordó la cooperación conjunta entre los dos gobiernos mediante la correcta ejecución de un plan de implementación, el cual será aplicado a personas de nacionalidad salvadoreña u hondureña», reza parte del comunicado presentado por el gobierno de Guatemala la semana pasada.
Además de confirmar los países de la región afectados con la medidas, las autoridades guatemaltecas indicaron que habrán restricciones para solicitar asilo. «Guatemala no recibirá menores no acompañados, mujeres embarazadas en el tercer trimestre de gestación, criminales que hayan cometido delitos en Estados Unidos y personas con discapacidad», explicó el ministro de Gobernación, y añadió que los migrantes hondureños y salvadoreños podrán solicitar medidas de protección en el punto migratorio de ingreso.
Por su parte, el gobierno de El Salvador, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, informó que se encuentra a la espera de recibir mayor información acerca de las acciones específicas que se tomarán con los salvadoreños en el marco de este convenio.
Al respecto, la canciller guatemalteca Sandra Jovel aseguró que se tendrán conversaciones con El Salvador y Honduras luego de terminar con las negociaciones del acuerdo migratorio, y que estas estarán a cargo del gobierno de Estados Unidos.
El convenio, que tendrá una vigencia de dos años y una evaluación trimestral para vigilar su cumplimiento, convierte así a Guatemala en un primer filtro para los salvadoreños y hondureños que intentan llegar a Estados Unidos.
*Con información de Prensa Libre y EFE
