Reportes locales en México confirman que el alambre de púas colocado por la administración Trump para evitar el ingreso de la Caravana Migrante a la frontera sur fue robado y vendido a habitantes de la zona, quienes lo colocaron en las bardas de sus hogares.
El alambre de púas fue instalado por la Guardia Nacional en la frontera entre San Diego y Tijuana en noviembre del año pasado con el fin de hacer frente a la llegada de miles de inmigrantes centroamericanos en busca de asilo. Hoy grupos de delicuencia son los autores del robo del alambrado que irónicamente están vendiendo a habitantes locales para protegerse de la inseguridad de la zona.
“Sabemos del robo de la concertina (alambre) de las autoridades de Estados Unidos”, indicó Marco Antonio Sotomayor Amezcua, secretario de Seguridad Pública Municipal de Tijuana.
La Policía de Tijuana reporta que en las últimas semanas han arrestado a unas 15 personas que estaban robando dicho material.
Por su parte los oficiales mexicanos aseguran que es muy fácil identificar las viviendas de la zona fronteriza que tienen colocado el alambre en las bardas de sus hogares; pues el diámetro es similar al que fue instalado en el muro fronterizo y además porque no se vende en ferreterías mexicanas.
Con información de La Opinión