El presidente electo, Nayib Bukele, afirmó que no ha decidido si mantendrá relaciones diplomáticas con China Comunista, aunque criticó al gigante asiático por no ser —dijo— respetuoso con El Salvador.
En sus primeras declaraciones públicas desde su victoria electoral del mes pasado, Bukele, de 37 años, afirmó que China no respeta las reglas del comercio, manipula su moneda y se entromete en las democracias de las demás naciones. No abundó en detalles sobre sus críticas.
“Queremos ser amigos de China, pero China tiene que ser amistosa con nosotros”, declaró Bukele durante la primera jornada de su visita de tres días a Washington. “No me refiero a dinero ni inversión, sino al respeto”.
El año pasado, el mandatario saliente Salvador Sánchez Cerén cambió el reconocimiento diplomático de El Salvador de Taiwán a China, medida que provocó que Washington llamara a consultas a su embajador.